El ex-astro infantil Frankie Muniz, conocido por su papel protagónico en la exitosa serie Malcolm in the Middle, está acaparando titulares no por su próximo regreso a la pantalla, sino por una declaración personal y audaz sobre su fe.
El domingo, el actor de 39 años y ahora piloto de carreras profesional, recurrió a su cuenta X (anteriormente Twitter) para expresar con orgullo su devoción, escribiendo: “¡Feliz domingo! Me enorgullece decir que vivo para Jesucristo. ¿Quién me acompaña?”
La publicación de Muniz resonó rápidamente entre sus seguidores, superando las 93,000 interacciones de “corazón” en poco tiempo y generando miles de comentarios, incluyendo el respaldo de otra figura de la televisión, la actriz Candace Cameron Bure de Full House, quien respondió: “¡Vamos! Alabado sea Dios”.
Un Estilo de Vida Lejos de Los Ángeles
La reciente declaración de fe se suma a las revelaciones de Muniz sobre su decisión de dejar Hollywood. El actor, que actualmente se prepara para protagonizar la próxima versión de Disney+ de la comedia original, Malcolm in the Middle: Life’s Still Unfair, ha sido abierto sobre cómo su mudanza a Arizona le “salvó” la vida.
“Sinceramente, no me gustaba Los Ángeles”, declaró a Us Weekly. “Así que me mudé a Arizona y me encanta. Siento que me salvó la vida, ya que empecé a disfrutar más de las pequeñas cosas de la vida, como el senderismo y el supermercado, porque era fácil”.
Estos comentarios refuerzan declaraciones anteriores hechas a Los Ángeles Times, donde el actor de 38 años enfatizó su estilo de vida sobrio: “Mudarme a Scottsdale en 2008, creo, me salvó la vida. Tengo 38 años. Todavía no he probado el alcohol; nunca he consumido drogas; nunca he hecho nada”.
Muniz ha compartido previamente su fe de manera creativa, como en un video de Instagram de enero donde se mostraba cantando la canción de alabanza “Build My Life” antes de ser detenido, ilustrando el contraste entre la paz espiritual y el caos mundano. Con una carrera dual en las pistas y un regreso a la actuación, la estrella parece haber encontrado un camino de vida centrado en sus convicciones personales.