Aunque no suelo hacer este tipo de declaraciones controversiales y que pueden ocasionar divisiones, con mucho respeto a mis hermanos en Chile que han creído en esta profecía dada al Pastor Umaña en el año 1954 donde decía que Chile seria un pais cristiano evangélico, necesito expresar mi pensamiento al respecto:No se trata de creerle a Dios, o de esperar en <fe>, mas bien de trata de conocer a Dios en su carácter soberano y justo, sus propósitos, su voluntad y su manera de obrar expresado y revelado únicamente a través de la Biblia y NO fuera de ella, por lo tanto esta «profecía» es bíblicamente IMPOSIBLE de cumplir, entendiendo que Dios ya ha trazado un plan para SU nación, para su pueblo que es La Iglesia Universal, que es el Israel espiritual y que NO apunta a una «nación o etnia» en particular.

Tomando en cuenta que ni siquiera el pueblo del antiguo Pacto <Israel> NO serán salvos todos ellos, sino solo aquellos que sean justificados en la Fe de Jesucristo según lo indica Romanos capitulo 2. Cuanto menos será salva toda una nación pagana como Chile y menos aun en esta sociedad que se aleja de Dios en los ámbitos políticos, culturales, educaciones, morales etc.

Al hablar de la labor de la Iglesia en nuestro pais, como en la mayoría de los paises en el mundo, la Iglesia en Chile, en la gran parte de sus congregaciones viven un evangelio basado en las emociones, en las buenas intenciones y en la mas profunda ignorancia bíblica y que es justamente de donde salió una falsa profecía como esta.

De antemano me disculpo por decir esta verdad que puede ofender la sensibilidad, y la vida espiritual de algún hermano y que además ha mantenido por décadas a muchos hermanos nuestros esperando algo que nunca Dios prometió. Juzguen ustedes mismos a la luz de Deuteronomio 18: 20-22″Pero el profeta que hable con presunción en mi nombre una palabra que yo no le haya mandado hablar, o que hable en el nombre de otros dioses, ese profeta <morirá> Y si dices en tu corazón:¿Cómo conoceremos la palabra que el Señor no ha hablado?. Cuando un profeta hable en el nombre del Señor, si la cosa no acontece ni se cumple, esa es palabra que el Señor no ha hablado; con arrogancia la ha hablado el profeta; no tendrás temor de él.

Paz del Señor.

Eva Maria