Redacción BLes– En el macabro comercio con cadáveres de bebés abortados, Planned Parenthood cobraba 60 dólares por cada uno y un intermediario los revendía a 2.000 dólares al Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. (HHS), y ahora un tribunal ordena a esta entidad publicar los detalles de estas compras. “El gobierno federal participó
Redacción BLes– En el macabro comercio con cadáveres de bebés abortados, Planned Parenthood cobraba 60 dólares por cada uno y un intermediario los revendía a 2.000 dólares al Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. (HHS), y ahora un tribunal ordena a esta entidad publicar los detalles de estas compras.
“El gobierno federal participó en este comercio potencialmente ilícito durante años”, denunció la organización Judicial Watch, detallando que siempre los pedía “frescos y nunca congelados”, según informó en su sitio web el 16 de marzo.
Asimismo, el tribunal argumentó que “hay razones para cuestionar” la legalidad de este comercio de partes humanas, dado que la ley federal prohíbe la venta de órganos fetales.
La comercialización era realizada por la empresa californiana Advanced Biosciences Resources (ABR, por la sigla en inglés) en asociación con la empresa multinacional ejecutora de abortos, Planned Parenthood, y otros proveedores de abortos para desmembrar fetos y vender sus partes para investigación.
ABR vendió hígados y glándulas timo de segundo trimestre de edad por cientos de dólares cada uno. También vendía cerebros, ojos y pulmones. Después de añadir los honorarios por servicios como el envío y la limpieza, ABR pudo cobrar más de 2.000 dólares por cada feto.
En las investigaciones de laboratorio se procuraba crear “ratones humanizados” que luego se utilizarían en estudios sobre el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), que causa el SIDA.
En estas circunstancias Judicial Watch considera que ABR “participó en una conducta delictiva”, de acuerdo con la legislación estadounidense 42 U.S.C. § 289 g-2(a), que contempla como ilegal transferir “cualquier tejido fetal humano a cambio de una contraprestación económica”.
No obstante, los informes sobre estas polémicas compras señalan que instituciones gubernamentales como la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA), y los Institutos Nacionales de Salud “NIH” pagaron una “contraprestación valiosa” a ABR haciendo que el Gobierno esté obligado a informar sobre ellas.
Con la orden de revelar las compras el tribunal respondió a una demanda de Judicial Watch de marzo de 2019, después de que el HHS no respondiera satisfactoriamente a una solicitud de FOIA de septiembre de 2018, hecha por Judicial Watch.
La comercialización de partes de bebés abortados es un hecho. Varios empleados de Planned Parenthood aceptaron que habían entregado partes de bebés abortados a cambio de dinero, en el primer día de la audiencia del proceso de la empresa contra el Centro para el Progreso Médico (CMP), el 3 de septiembre en San Francisco, Estados Unidos, informó CMP.
La perturbadora intervención de Planned Parenthood parece no tener fin. Además de ser la mayor clínica abortista del mundo, también es una de las principales proveedoras de una hormona que está siendo utilizada para que adolescentes y niños puedan “cambiar de sexo”.
José Hermosa – BLes.com