A través de los años hemos aprendido en esta parte del mundo, en Argentina, lo que significan “los fueros”.
Fueros: jurisdicción, poder, privilegio, exención, prerrogativa.
Algo que alcanzan a las autoridades políticas en el ejercicio de sus funciones, no se les puede aplicar ninguna pena, ninguna condena, muchos acceden a cargos honoríficos, para mantener esos privilegios después de retirarse, y no ir a la cárcel por sus delitos.
A través de los años hemos aprendido en esta parte del mundo, en Argentina, lo que significan “los fueros”.
En el universo Cristiano una gran mayoría del liderazgo ha “construido” esos fueros, o inmunidad, mejor dicho impunidad, enseñando sistemáticamente a cuantos pueden alcanzar a ¡No juzgar!, no ¡somos quienes para juzgar a otro!, algo completamente anti bíblico, hasta cuando compras en el mercado una leche, estás juzgando, marcas, calidad, y precios.
Juzgar: Discernir, sopesar, evaluar, comparar, razonar.
Otra: “No toquemos la unción, o a los ungidos”, ese respeto pasa por no hacer justicia por nuestra mano, no vengarnos, y no condenar, eso significa “no tocar la unción”, (pero siempre será, no aceptar el pecado y la desobediencia contra Dios).
La otra: “El principio de la honra”, que tampoco es indiscriminado, la Biblia dice claramente: “Honra al que merece honra” (Romanos 13:7) Una esposa no puede someterse y honrar a un marido que la violenta y humilla, un hijo no debe honrar a un padre que lo abusó, no podemos honrar nuestras autoridades si ellas deshonran a Dios, no puedes honrar a un “pastor” adultero, mercenario, o mundano.
Esto redunda en miles de “creyentes” que aceptan, compran y venden cualquier cosa, así sea basura espiritual, como el humanismo, las filosofías, el liberalismo, la gracia barata, la desacralización de lo santo, y se “brotan” cuando alguien genéricamente denuncia falsas doctrinas, otro evangelio, o un evangelio diferente.
Aún sin personalizar la cosa, imaginándose de quien podría tratarse, arremeten contra todo lo que “roce” esas “filosofías bíblicas”.
Lo más contundente que podemos presentar es la evidencia bíblica:
“Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar…En su simulación…De tal manera que aún Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos…Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos…” Gálatas 2:11-14)
Pablo lo escribe en su carta a los Gálatas, lo hace público y notorio, con nombre propio, y sabiendo que quedaría en las páginas de la Biblia para futuras generaciones. Esto hoy es contencioso, “no edifica”
No olvidemos que Pedro era un ícono entre los primeros cristianos, un referente, el apóstol más cercano a Jesús, Pablo en ese momento, llamado aparte, a lo último, quien sabe donde y como, después que Jesús fue levantado, no tenía comparación con una figura como Pedro.
No me imagino diciéndole a Pablo:
¡Porque mejor no te ocupas de predicar el evangelio!…”¿Donde está el amor de Dios que juzgas a un siervo?”…¡Cada uno dará cuentas, son formas diferentes!…¡Lo que hiciste no edifica y encima señalas con nombre!…¡Pedro sirve a Dios con un ministerio distinto! …
“Le resistí cara a cara delante de todos”
Ni siquiera fue una corrección en privado, particular, fue público, le resistí, no trató de ganarle, convencerle, hacerle reflexionar, fue una confrontación, dijo: “era de condenar”
El problema hoy es que como estos falsos maestros han relativizado el pecado, ignorado el infierno, y descartado el arrepentimiento, y nos presentaron un Dios complaciente, compinche y pícaro, divertido y amoroso hasta empalagar, ¡no podemos condenar!, ni aún el adulterio, las borracheras, las mentiras, las blasfemias y las herejías.
Nombra también a Bernabé, su compañero en la obra misionera, otro referente en la iglesia de los Hechos, y que dice sobre la situación: “simulación e hipocresía de todos ellos”
¿Por que razón se entromete Pablo en un asunto que no le concierne? Cada uno tenía un ministerio diferente, cada uno daría cuenta de si, lo hace por una sencilla razón:
“Cuando vi, que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio”
Debemos defender la verdad, la mentira le hace más daño a la iglesia que los brujos y los satanistas, ella está solapada y muchos descubrirán que fueron engañados, cuando sea demasiado tarde, predicar la verdad, defenderla, es predicar.
Yo combato las ratas en una zona rural donde tengo una propiedad, y se vende un sebo para exterminarlas, que suelo comprar, tienen el aspecto de un trozo de queso (su comida predilecta), el 98 % de su composición es alimento verdadero, dicen, que solo un 2 % es veneno, pero alcanza para matarlas.
Así funciona lo falso, un gran porcentaje es, lo que a la gente les gusta oír, lo que les arrulla y no ofende, el asunto es que lo traguen, después que lo hicieron, lo advertirán cuando ya no haya nada que hacer, en el camino convencerán a otros que esos quesitos que hallaron son una exquisitez, lo mejor de lo mejor.
Por: Sergio Gebel
Originally posted 2024-02-28 20:06:59.
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